LAS OTRAS NOTICIAS - 2024 (333)

 LAS OTRAS NOTICIAS (333)

22 de julio de 2024

FUENTES: El País, eldiario.es, Público, InfoLibre, El Salto, Contextos, Rebelion.or, Cadena Ser.

CONTUNDENTE RESOLUCIÓN CONTRA ISRAEL

El Tribunal Internacional de Justicia (TIJ), organismo de la ONU con sede en La Haya, Holanda, considera que la ocupación de los Territorios Palestinos por parte de Israel viola el derecho internacional, concretamente la Cuarta Convención de Ginebra sobre el desplazamiento forzado de personas y la explotación de recursos naturales.

El organismo menciona los mecanismos utilizados por Israel para afianzar el control en esos territorios en Jerusalén Este y Cisjordania: Mantenimiento y expansión de los asentamientos, construcción de infraestructura asociada y del muro de seguridad, explotación de los recursos naturales, proclamación de Jerusalén como capital de Israel, aplicación integral de la ley interna israelí en Jerusalén Este y Cisjordania…

Israel, dice el TIJ, debe poner fin a su política de asentamientos, comenzando por el "cese inmediato" de cualquier procedimiento de expansión; proporcionar una reparación completa por los daños causados" por sus actos "ilegales", lo que incluye devolver la tierra y otras propiedades inmuebles incautadas a los palestinos desde que comenzó la ocupación en 1967; evacuar a todos los colonos de los asentamientos existentes y el desmantelamiento de las partes del muro construido por Israel en el territorio palestino ocupado; y permitir el regreso de todos los palestinos desplazados durante la ocupación a su lugar de residencia original.

Según datos de la organización Peace Now, actualmente existen 337 asentamientos de colonos israelíes en el territorio palestino de Jerusalén Este y Cisjordania, donde viven unos 700.000 colonos judíos.

Todos sabemos que ni el gobierno israelí va a hacer caso a esta resolución ni la comunidad internacional moverá un dedo para que se lleve a la práctica. Ya nos hemos acostumbrado a que el derecho internacional solo deben cumplirlo los débiles. Para los fuertes rige la ley de la selva

VUELVE EL PRURIEMPLEO

En España existen casi 21,4 millones de cotizantes a la Seguridad Social (cifra récord) y los desocupados “solo” son 2,5 millones. Dicen que son datos buenos. Pese a esa revitalización del mercado y laboral la fortaleza de la economía, hay 591.300 personas que tienen más de un empleo para completar sus ingresos, de acuerdo al Instituto Nacional de Estadística. Es el nivel más alto desde que se tienen registros.

El 90% de ellos trabajan en el sector servicios, sector donde domina la temporalidad, los bajos salarios y las largas jornadas.

El salario medio anual es de 26.948,87 euros por trabajador, pero los trabajadores no cualificados en servicios recibieron 14.665,40 euros, un 45,6% inferior al medio, y una remuneración por debajo del salario mínimo interprofesional actual (15.876 euros).

LA DESIGUALDAD QUE NOS PESA

Los contribuyentes españoles que ganan más de 600.000 euros anuales aumentaron en un año un 25%, y son ya 15.200, la cifra más alta de toda la serie histórica, según la Agencia Tributaria. Nunca en España hubo tantos ricos.

Ese grupo solo representan el 0,7% de los contribuyentes totales de España, y su crecimiento se debe a las grandes rentas percibidas por los resultados empresariales, los intereses derivados del capital y las inversiones financieras, que les han reportado mayores beneficios que nunca.

En el lado contrario, casi 13 millones de personas cobran menos de 21.000 euros al año, y 1,2 millones no ingresan nada.

HACIA LA DEBACLE CLIMÁTICA

La temperatura media de la Tierra lleva doce meses consecutivos registrando aumentos iguales o superiores a los 1,5º grados respecto a los niveles preindustriales (1850-1900), según el Servicio de Cambio Climático Copernicus, de la Unión Europea.

El incremento de 1,5 grados es el primer umbral establecido por el Acuerdo de París (2015) para detener la crisis climática, como límite deseado para frenar la debacle. El acuerdo estableció como objetivo un tope máximo de 2º grados, que, de alcanzarse, multiplicaría exponencialmente los impactos del cambio climático.

LOS RICOS Y LOS IMPUESTOS

Nos dijeron que si los ricos pagaban menos impuestos invertirían más en la economía, crearían más empleos y la abundancia rebalsaría por toda la sociedad. En esa tesis se basaron los patriarcas del neoliberalismo, Margaret Thatcher, Ronald Reagan y compañía, allá por los años 80, para liberar a los ricos del infierno fiscal.

De esa manera, el impuesto sobre la renta de los ricos en el Reino Unido bajó del 98% al 40% en menos de una década, y la de Estados Unidos del 70% al 28%.

Desde 1980, la renta del 0,1% más rico de Estados Unidos ha crecido un 320% anual, mientras que el sueldo anual promedio de los trabajadores ha subido un 0,1%. La teoría del rebalse no funcionó.

La Comunidad de Madrid, que es la que más ha reducido sus impuestos a los más ricos en España, ha perdido un 26,1% de su recaudación teórica (6.255 millones de euros al año).

¿Que tenemos un sistema fiscal progresivo? ¡Mentira! Los trabajadores pagan en promedio el 39,5% de su salario en impuestos, y los jubilados el 30%, mientras los 143 mayores grupos empresariales de España pagan un tipo efectivo del 4,98% en el impuesto de sociedades y las 1.800 mayores fortunas tributan solo al 0,03% en el impuesto de patrimonio.

“Es justo que el que tiene mucho pague mucho en impuestos, y el que tiene poco, pague poco”. Lo decía el filósofo griego Aristóteles (384-322 a. C.), poco sospechoso de izquierdismo. Parece que creía en la equidad y la justicia distributiva. Si levantara la cabeza…

EL HAMBRE QUE NO CESA

Casi el 30% de la población mundial se enfrenta a la inseguridad alimentaria y el 42% no puede permitirse una dieta sana, según un reciente estudio del Grupo Internacional de Expertos en Sistemas Alimentarios Sostenibles (y publicado por la organización Food From Somewhere, que sostiene que el objetivo mundial del hambre cero en 2030 está más lejos que nunca.

El informe afirma que las cadenas de suministro de alimentos controladas por grandes empresas han demostrado ser especialmente vulnerables a las perturbaciones del comercio, los efectos del clima y la volatilidad de los mercados, y con ello han socavado los medios de subsistencia de los pequeños productores.

Precisa el informe que los sistemas alimentarios locales son vitales para alimentar a un planeta cada vez más hambriento, y que es hora de que los gobiernos “actúen con decisión y utilicen la contratación pública para reforzar a los pequeños productores sostenibles, dotar a los mercados alimentarios locales y regionales de la infraestructura que necesitan y protegerlos del dominio empresarial”.

ARMAS “DESAPARECIDAS” EN UCRANIA

Más de 300.000 armas de fuego se han esfumado en Ucrania desde el inicio de la invasión rusa en febrero de 2022, según datos de la organización Global Initiative Against Transnational Organized Crime, aunque otras estimaciones elevan las armas desaparecidas a más de 593.000.

Se trata fundamentalmente de armas cortas y ligeras que han desaparecido en primera línea del frente de batalla o que han sido robadas de los arsenales, pero también sistemas antiaéreos portátiles y drones de guerra, que pueden acabar en manos de los grupos del crimen organizado.

También han desaparecido muchas de las armas rusas recuperadas en el campo de batalla por los soldados ucranianos.

Tras la guerra de los Balcanes en los años 90, proliferaron las armas en el mercado negro; incluso todavía hoy las mafias se nutren de aquellas armas; de hecho, la región sigue siendo una de las principales fuentes de suministro de armas ilegales de toda Europa.

El fundado temor de los expertos es que Ucrania siga estos pasos y acabe convirtiéndose en una nueva gran fuente del tráfico de armas, con el agravante de que en Ucrania hay muchas más armas de las que hubo en los Balcanes.

NUESTROS SUPERMERCADOS Y LA AMAZONÍA

Los supermercados Carrefour, Mercadona, Alcampo, Lidl, El Corte Inglés, Grupo Día y Aldi son responsables de la deforestación de la Amazonía y de la sabana tropical del Cerrado brasileño, dos regiones con una enorme biodiversidad y con unas vitales contribuciones al precario equilibrio climático planetario, de acuerdo a un estudio de la ONG ambientalista Mighty Earth.

Las citadas empresas se niegan a tomar medidas para evitar que la soja utilizada en los productos cárnicos provenga de esa región. La misma falta de compromiso muestran los grandes productores cárnicos: ElPozo, Costa Food, Grupo Fuertes, Campofrío o Valls.

En 2023, según el informe, España importó desde Brasil cuatro millones de toneladas de soja destinados principalmente a piensos para ganado. Esta soja está vinculada a la deforestación.

El sector alimentario español “no presta suficiente atención” a las consecuencias ambientales de la importación de soja producto de la deforestación, dice Mighty Earth.

LA POBREZA EN LA UNIÓN EUROPEA

En la Unión Europea hay 94,6 millones de personas en riesgo de pobreza o exclusión social (el 21% de su población), según Eurostat, la Oficina Europea de Estadística.

Los países que tienen el mayor porcentaje son Rumanía (32%), Bulgaria (30%), España (27%) y Grecia (26%).

Se considera en riesgo de pobreza y/o exclusión social a la población que vive con bajos ingresos, que sufre privación material severa o que viven en hogares con una intensidad de empleo muy baja.

Los elementos que conforman la privación material y social severa son no poder permitirse una comida de carne, pollo o pescado cada dos días, no poder tener vacaciones al menos una semana al año, no poder mantener la vivienda con una temperatura adecuada, no tener capacidad para afrontar gastos imprevistos o tener retrasos en el pago de los gastos relacionados con la vivienda.

¡HAY QUE PONERSE LAS PILAS CON LAS PILAS…!

En España se ponen cada año en el mercado 15.500 toneladas de pilas cilíndricas y de botón (unos 725 millones de unidades), pero solo se recogen y se reciclan la mitad, mientras el resto acaba en canales inapropiados contribuyendo a la contaminación ambiental, según datos del Ministerio para la Transición Ecológica.

Las utilizamos en los mandos a distancia, relojes de pared y de pulsera, despertadores, radios, básculas de peso corporal, juguetes, audífonos, linternas, ratones y teclados inalámbricos, detectores de humo, calculadoras…

Las pilas contienen más de siete elementos tóxicos y un 30% de su composición corresponde a sustancias químicas peligrosas. Además, una pila tarda entre unos 500 y 1.000 años en degradarse. Dicen que sólo una pila de botón puede contaminar dos millones de litros de agua, y una pila alcalina 167.000 litros.

Las pilas usadas pueden depositarse en los puntos de venta de pilas, los puntos limpios de ayuntamientos y comunidades autónomas, los contenedores en la vía pública o en diferentes establecimientos.

En el reciclaje, algunas pilas encuentran una segunda vida, al extraer de ellas una “masa negra” compuesta por manganeso, zinc y carbón que se destina a la fabricación de fertilizantes.